Pink Sigh Elixir toma el código oriental–floral y lo convierte en seducción envolvente.
La salida despliega caramelo luminoso con violeta y un destello de pimienta rosa y bergamota: atención inmediata, ánimo arriba y foco en tu presencia. En el corazón, las notas atalcadas estilizan la silueta; la rosa aporta un romanticismo pulido mientras el pachulí tensa el contorno con elegancia moderna, evitando lo empalagoso. La base se posa en vainilla fina con un trazo animal sutil, almizcle limpio y maderas suaves, logrando una estela cálida y táctil que acompaña sin invadir.
Diseñado para la noche —perfecto también en ocasiones especiales— proyecta sofisticación y magnetismo con buenas maneras. Intensidad 4/5: proyección firme y duración prolongada, calibradas para equilibrio entre poder y confort. Elixir de alta concentración con arquitectura precisa: abre gourmand especiada, respira en un bouquet aterciopelado y cierra en un fondo cremoso–musky que deja memoria.
Ritual recomendado: aplica 2–4 atomizaciones en clavículas, cuello lateral y muñecas a 10–15 cm; no frotes. Hidrata la piel antes para potenciar fijación; si buscas más presencia, una vaporización ligera en prenda a 30 cm.